Madrid, 2 de marzo de 2021
El Observatorio Profesional de Protocolo y Eventos (#OPPE) celebró hoy martes su XXI Jornada de debate en un encuentro telemático en el que se registraron más de 400 de personas. En esta ocasión, se optó por desarrollar una gran mesa abierta de debate en vez de abordar casos concretos. Un importante grupo de profesionales se planteó si todo vale ante las posibles adaptaciones o interpretaciones de las normativas protocolarias y técnicas organizativas en función del tipo de evento y sus objetivos. El nuevo formato introducido para la ocasión sirvió para fomentar aún más el debate y fueron muchos los que se plantearon hasta dónde se puede llegar en aspectos como la cesión de la presidencia, dónde ubicar a personalidades que no contemplan las normativas, si en las fotos de familia debe existir un orden en el que primen más las precedencias frente a los protagonistas reales de un evento, etc.
Los máximos responsables de protocolo de las principales instituciones oficiales de Aragón fueron los encargados de plantear el debate centrándose en dos asuntos: las fotos de familia y las líneas de saludo. “Venimos a provocar, a invitar a la reflexión y a abrir debate sobre estos dos temas”. Se preguntaron cuestiones como las siguientes: ¿Los primeros van siempre delante? ¿Las fotos de familia están acordes con lo que se quiere comunicar? ¿Distinguimos bien los conceptos de protocolo y ceremonial en las colocaciones? ¿Hay que seguir haciendo lo mismo porque así lo hemos hecho siempre?
Para abordar esta cuestión, Javier Carnicer, José Luis Angoy, Gemma Fernández Ges y Chema Gimeno tomaron como referencia la celebración de la V Cumbre Empresarial por la Competitividad de Aragón y el acto de entrega del Premio Empresario de Aragón 2020, al que acudió el Rey Don Felipe. Se celebró el 19 de febrero en la Sala de la Corona del Edificio Pignatelli de Zaragoza, sede central de la Diputación General Aragón, es decir, del Ejecutivo autónomo. Allí fue donde el Rey hizo entrega de 22 placas conmemorativas a empresas destacadas por su apoyo e implicación para hacer frente a la pandemia en Aragón. Los convocantes habían sido el Gobierno de Aragón y la CEOE.
Estos profesionales insistieron en la posibilidad de hacer más utilización de la puesta en escena de fotos de familia en espiral que utilizando los métodos del protocolo tradicional. Hasta el punto de cuestionar las “correctas ubicaciones” de los protagonistas. Consideraron que en este evento el sistema en espiral resolvía mejor sus propuestas protocolarias. Comentaron más actos y más tipos de fotos de familia: descentrada, en orla, tipo marca, asimétrica…
Tras su exposición, otros profesionales tomaron la palabra para poner en duda la conveniencia de saltarse las normas tradicionales. “No estoy muy de acuerdo con vuestra propuesta”, dijo Carlos Fuente. “Es cierto que se pueden reconvertir las técnicas en función de los objetivos del acto, está claro. La opción de fotos en espiral está bien pero no todo el mundo lo va a entender y además puede generar problemas de protocolo. Comprendiendo perfectamente la propuesta que habéis planteado en el caso de hoy, pero creo que ésta tiene sus riesgos si se elevara a teoría general. Para ello, necesitaría una cierta madurez”
En una sintonía muy similar se pronunciaron Montse Pascual, jefa de Protocolo del Ayuntamiento de Tarragona; Javier Vila, socio director de JVSG en Estados Unidos; Javier Vilariño, gerente de Relaciones Institucionales y Protocolo de ABANCA); Virginia Navarro Landa, jefa de Protocolo y Relaciones Institucionales de la Diputación de Córdoba; Gemma Rodríguez Alonso, asesora técnica de Protocolo en Xunta de Galicia, o Fernando Fernández, director de Relaciones Institucionales e Internacionales del Consejo de Estado, entre otros. Estimaron, en cualquier caso, que las propuestas eran de interés, hasta el punto de considerar, como manifestó Gemma Rodríguez Alonso, que le encantaría ver esto “reflejado en doctrina en un libro, en un manual. Y dar salida a las pequeñas instituciones y corporaciones que no tienen tanta fuerza por ser más pequeñas. Las fórmulas de Zaragoza son muy buenas y me encanta que el protocolo oficial sea pionero. Aquí es donde este Observatorio está dando pistas para el futuro y esto es cumplir la finalidad del mismo”.
Fernando Fernández aseguró que esta propuesta podría ser viable en Aragón por sus propias peculiaridades, “pero muy difícil de llevar a cabo en Madrid. Yo he practicado la foto en espiral en Moncloa, incluso con gente de confianza, pero no se entendió muy bien. Se habla de explicar a los medios esta propuesta y hacer pedagogía con ellos, pero es algo que yo veo bastante complicado. En cualquier caso, doy la bienvenida a la propuesta”.
También tomo la palabra el presidente de la Escuela Internacional de Protocolo, Gerardo Correas, quien se mostró totalmente partidario de que la cesión de la presidencia no sea nunca un caballo de batalla de los profesionales del protocolo. “La clave es la pérdida del titular del acto por la imposición de normas en las presidencias. El titular de la prensa es el titular político; a los periodistas les da igual quién presida o no presida. Para nosotros, lo importante es no perder la esencia del evento: el mensaje que estoy tratando de dar. Y con esto mismo si nos fuésemos a los actos no oficiales, abriríamos un melón enorme”.
Cerró la jornada el presidente en funciones del Observatorio, Rafael Vidal, quien señaló que el mejor resumen para esta interesante jornada “es que nuestro sector se mueve. Una profesión que no lo hace está muerta y esto felizmente no nos pasa a nosotros. En cada jornada vemos cómo siempre tenemos cosas nuevas que aportar. Este foro es un magnífico escenario de encuentro”.