Santiago de Compostela, 4 de mayo de 2021

El espectacular Plató Xacobeo de la Cidade da Cultura de Santiago de Compostela fue el escenario de lujo desde el que se ofreció esta tarde la Jornada XXIII del Observatorio Profesional de Protocolo y Eventos (OPPE). Justo el mismo escenario en el que durante la mañana se presentaba el Congreso Internacional de Protocolo y Eventos que organiza este Observatorio y que se celebrará en la capital gallega los próximos días 11, 12 y 13 de noviembre. En esta ocasión, tocaba hablar de protocolo y producción de eventos, tema que aportó un interesante debate en torno de la necesidad de reciclarse en logística y producción y su coordinación.

Lo habían hecho por la mañana antes los medios de comunicación y por la tarde quisieron informar a los asistentes a la Jornada de esta presentación. Así que volvieron a estar en el plató el presidente del OPPE, Rafael Vidal; el vicepresidente del mismo, Carlos Fuente; las jefas de Protocolo de la Xunta de Galicia, Isabel Figueira Raña y del Ayuntamiento de Santiago, Ana Garrido Ruso, respectivamente; el jefe de Protocolo de la Junta de Extremadura, Jesús López; la especialista en eventos corporativos, Mar Gil, y el jefe de Protocolo de ABANCA, Javier Vilariño. (Ver nota de prensa enviada a los medios o reproducir el acto completo de presentación del congreso).

Producción, una disciplina esencial…

Aunque la presentación del Congreso tuvo especial protagonismo en esta Jornada, lo tuvo aún más, como es lógico, la temática del día, que, como se ha dicho, versaba en torno a la importancia de la producción en el mundo del protocolo. ¿Tiene más importancia una disciplina que la otra? ¿El protocolo reconoce suficientemente las labores de producción en el mundo actual? El debate estuvo muy interesante, aunque no hubo grandes sorpresas. En regla general, todos coincidieron en que la producción en los eventos es absolutamente esencial en el protocolo (algo que nadie discutió en ningún momento, como es obvio) y nadie puso en duda de que ambas disciplinas deben trabajar de la mano para obtener buenos resultados en la organización de un evento.

Donde se produjo algo más de debate fue acerca de si una disciplina era más importante que la otra, si los expertos en protocolo contaban con la suficiente preparación en materia de producción. Pero tampoco hubo muchas discrepancias, habida cuenta de que más o menos hubo cierto consenso al reconocer que los expertos en protocolo todavía no contaban con la preparación suficiente en materia de producción y que, por otra parte, ni la una ni la otra eran más importantes. “Ambas deben ir de la mano, como otras tantas disciplinas que han de confluir a la hora de organizar un evento”.

Algunos dejaron constancia de lo poco que les gustaba que a veces se considerara a la gente de producción “como meros técnicos, porque esto no es así, eso es desconocer lo que es la producción. Incluso se les llega a considerar en ocasiones como meros proveedores, cuando son realmente unos compañeros de equipo de gran relevancia. Aquí no hay gente de primera ni de segunda. En las empresas este debate apenas se plantea porque se da por hecho la importancia de la producción con reuniones permanente y no suele haber problemas. Los límites están muy bien marcados entre una y otra área”.

.. pero Protocolo es el nexo

En esta dicotomía, y mostrando siempre el máximo respeto hacia el “imprescindible personal de producción”, hubo participantes que no dudaron en considerar que el responsable de protocolo es “sin duda” quien tiene el concepto y la idea inicial y principal del evento creado “y el que conoce mejor que nadie, por lo tanto, la filosofía del acto, “lo que le autoriza a dirigir la preparación y desarrollo del mismo. Esto no quiere decir que no se cuente con producción, ni mucho menos”.

Esta afirmación tuvo seguidores en el debate, aunque quedó claro en todo momento que a nadie le gustaba hablar de primeros ni de segundos ni de terceros. “No hay partes; es el conjunto el que tiene que trabajar al unísono”. Incluso se afirmó que Protocolo “es el que tiene el conocimiento de las costumbres, de las preferencias… y sigue siendo el que facilita el gran engranaje de todas las áreas involucradas en un evento, el gran nexo entre todas las disciplinas que confluyen en un acto”. Otros dejaron claro que en un evento los involucrados “somos una parte de un todo, y por tanto todo debe ser un trabajo conjunto: producción, marketing, protocolo, comunicación… La tarea tiene que ser de todos conjuntamente. Sin duda eso es el futuro”.

En el momento del cierre de la jornada, como es habitual, tomó la palabra el presidente del Observatorio, Rafael Vidal, quien se mostró muy satisfecho del fructuoso debate que se había mantenido, recogiendo el sentir general del debate: que no había duda de que Protocolo y Producción deber trabajar de la mano para que un evento consiga el éxito pleno. Pero en esta ocasión no cerró él este acto: ofreció este honor “a la persona que es de ley que lo haga: nuestra anfitriona en este plató y en esta ciudad de Santiago de Compostela”. Se refería a Isabel Figueira, jefa de Protocolo de la Xunta de Galicia, quien agradeció el gesto del presidente. Figueira aprovecho la ocasión para decir que esperaba a todo el mundo en Galicia los próximos días 11, 12 y 13 de noviembre, “porque, sin duda, disfrutaremos de un gran congreso”.